PASTAS DE ALMENDRA RECETA DE LA ABUELA MARÍA

Descubre cómo preparar unas deliciosas pastas de almendra con la receta de la abuela María, con una textura perfecta, fáciles e irresistibles.

Si hay un dulce que nunca falla en la merienda, esas son las pastas de almendra la receta de la abuela María. Con su textura crujiente por fuera y su interior ligeramente tierno, cada bocado es un auténtico placer. Además, su inconfundible aroma a almendra tostada hace que nadie pueda resistirse.

Estas pastas tienen ese toque tradicional que nos transporta a la cocina de siempre, donde los ingredientes sencillos se transformaban en auténticas delicias.

Son perfectas para acompañar un café, un té o simplemente para darte un capricho cuando te apetece algo dulce pero casero.

Lo mejor de esta receta es que no hace falta ser un experto en repostería para conseguir un resultado espectacular.

Con unos pocos pasos y los ingredientes adecuados, podrás disfrutar de unas pastas deliciosas, como las que hacían nuestras abuelas.

Si quieres sorprender a tu familia con un dulce casero y lleno de sabor, no te pierdas esta pastas de almendra con la receta de la abuela María. Sigue leyendo y descubre cómo prepararlas fácilmente en casa. Te van a encantar.

INGREDIENTES DE LA RECETA DE PASTAS DE ALMENDRA DE LA ABUELA

(para unas 12-15 pastas)

  • 250 g de harina de trigo

  • 125 g de almendra molida

  • 100 g de azúcar glas

  • 125 g de mantequilla a temperatura ambiente

  • 1 huevo

  • ½ cucharadita de canela en polvo (opcional)

  • ½ cucharadita de esencia de vainilla (opcional)

  • 1 pizca de sal

  • Almendras laminadas para decorar

  • 1 huevo batido (para pincelar)

PREPARACIÓN DE LA RECETA DE PASTAS DE ALMENDRA DE LA ABUELA

En un bol grande, tamiza la harina y mézclala con la almendra molida, el azúcar glas, la canela y la sal. Este paso ayuda a que la masa quede más homogénea.

Añade la mantequilla cortada en cubos y mezcla con las manos o con una espátula hasta obtener una textura arenosa.

Agrega el huevo y la esencia de vainilla, si la usas. Amasa hasta formar una masa compacta y homogénea.

Si notas que está muy pegajosa, puedes añadir una cucharada extra de harina.

Forma una bola, cúbrela con film transparente y deja reposar en la nevera durante unos 30 minutos. Esto hará que la masa sea más fácil de manejar.

Precalienta el horno a 180 °C con calor arriba y abajo.

Pasado el tiempo de reposo, estira la masa con un rodillo hasta que tenga un grosor de aproximadamente 1 cm.

Luego, corta porciones en forma de tortitas (puedes hacerlo con un cortador redondo o simplemente con las manos).

Coloca las pastas sobre una bandeja con papel de horno. Pincela cada una con huevo batido y espolvorea generosamente almendras laminadas por encima.

Hornea en la parte media del horno durante 12-15 minutos, o hasta que los bordes empiecen a dorarse ligeramente.

Saca las pastas del horno y déjalas enfriar en una rejilla antes de servir. Al principio pueden parecer blandas, pero al enfriar adquieren su textura perfecta.


💡 CONSEJOS FINALES

Si quieres que tengan un toque más crujiente, puedes tostarlas unos minutos extra con el horno apagado y la puerta entreabierta.

Para potenciar aún más el sabor a almendra, puedes sustituir una parte de la harina por más almendra molida.

Estas pastas se conservan bien en un recipiente hermético durante varios días, aunque es difícil que duren tanto sin que alguien se las coma antes.


Consulta cualquier duda o pídenos la receta que necesites en nuestra App Quick Recipe. Te respondemos al momento.

DESCÁRGALA GRATIS TOCANDO AQUÍ