La abuela nos sigue trayendo ideas fresquitas, que pensamos, os pueden ayudar. Esta es una ensalada contundente, pero que no se hace pesada, a su vez, también es refrescante, con un buen aporte de vitamina, tan necesarias todos los días.
INGREDIENTES:
- 200 gr de garbanzos
- 1 tomate grande
- 1 cebolla
- 1 pimiento verde
- 1 pimiento rojo
- 3 huevos
- 2 latas de atún
- Aceitunas negras
- Aceitunas verdes
- Vinagre
- Sal
- Aceite de oliva virgen extra
PREPARACIÓN:
Dejamos en remojo los garbanzos, con abundante agua, al menos durante 10 o 12 horas, para facilitarla cocción.
Tiramos el agua de remojo, lavamos bien y cocemos en agua limpia, hasta que estén tiernos. Si quieres ahorrarte, por tiempo, este paso, puedes usar un tarro de garbanzos ya cocidos, eso a tu elección.
Los huevos los cocemos durante aproximadamente 10 minutos desde que el agua comience a hervir. Cuando estén, los ponemos en agua fría y reservamos.
En una fuente, haremos una base con los garbanzos.
El tomate bien limpio, lo troceamos en daditos pequeños y lo añadimos. Igual haremos con la cebolla, el pimiento verde y el pimiento rojo.
Quitamos la cáscara a los huevos cocidos, aquí os dejo el enlace con un consejo, para que os resulte muy fácil.
Dos de los huevos los troceamos y los añadimos a nuestra ensalada, el último lo reservamos para decorar.
Ponemos sal y vinagre al gusto.
Escurrimos el atún, lo desmigamos y también los añadimos.
Decoramos con las aceitunas y el huevo.
Por último, ponemos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra.
Esta ensalada se come bien fría.