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Receta de flan de vainilla con caramelo

FLAN DE VAINILLA CON CARAMELO CASERO

    El flan de vainilla con caramelo casero es uno de esos postres que nunca pasan de moda.

    Su textura suave y su sabor equilibrado lo convierten en el favorito de muchos. Además, es una receta sencilla que cualquiera puede preparar en casa.

    Nada supera el placer de disfrutar un buen flan de vainilla con caramelo casero después de una comida.

    Su combinación de dulzura y cremosidad es simplemente irresistible. Con ingredientes básicos y pasos fáciles, lograrás un resultado espectacular.

    El secreto de un flan perfecto está en la mezcla de huevos, leche y vainilla, así como en la paciencia para cocinarlo a fuego lento.

    El caramelo, dorado y ligeramente amargo, aporta ese toque especial que equilibra el dulzor.

    Esta receta se puede adaptar a distintos gustos y necesidades. Puedes hacerlo más ligero con leche descremada o darle un extra de cremosidad con leche condensada. Incluso puedes aromatizarlo con ralladura de naranja o canela.

    Uno de los mayores placeres al hacer flan es desmoldarlo y ver cómo el caramelo cubre la superficie con un brillo perfecto.

    Servido frío, cada cucharada es una delicia que se deshace en la boca.

    Si nunca has preparado un flan de vainilla con caramelo casero, esta es tu oportunidad para intentarlo.

    Con un poco de paciencia y siguiendo los pasos adecuados, obtendrás un postre digno de cualquier ocasión especial.

    Ya sea para compartir en familia o disfrutar solo, este flan es siempre un acierto. Su sabor clásico y su textura inigualable harán que quieras repetir una y otra vez.

    INGREDIENTES DE LA RECETA

    Para el caramelo:

    • 150 g de azúcar
    • 3 cucharadas de agua
    • Unas gotas de jugo de limón (opcional)

    Para el flan:

    • 500 ml de leche entera
    • 4 huevos
    • 120 g de azúcar
    • 1 cucharada de esencia de vainilla

    PREPARACIÓN DE LA RECETA DE FLAN DE VAINILLA CON CARAMELO CASERO

    En una sartén a fuego medio, coloca el azúcar y el agua. Cocina sin remover hasta que tome un color dorado.

    Si lo deseas, añade unas gotas de jugo de limón para evitar que cristalice.

    Cuando esté listo, viértelo rápidamente en el fondo del molde o en flaneras individuales y mueve para cubrir bien la base.

    En un bol, bate los huevos con el azúcar hasta que se integren. Añade la leche y la esencia de vainilla, y mezcla suavemente sin hacer espuma.

    Para un flan más suave, cuela la mezcla antes de verterla en el molde caramelizado.

    Coloca el molde dentro de una bandeja para horno con agua caliente hasta la mitad del molde. Hornea a 160°C durante aproximadamente 50-60 minutos, o hasta que al insertar un palillo salga limpio.

    Deja enfriar a temperatura ambiente y luego refrigera al menos 4 horas (mejor si es toda la noche). Para desmoldar, pasa un cuchillo por los bordes y voltea con cuidado sobre un plato.

    Corta en porciones y disfruta de un delicioso flan de vainilla con caramelo casero, cremoso y lleno de sabor.

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