RECETA DE TIRAMISÚ CASERO MUY FÁCIL

Receta de tiramisú casero

Aprende a hacer una irresistible receta de tiramisú casero con esta guía paso a paso.

Este clásico postre italiano, admirado en todo el mundo, es perfecto para sorprender a tus invitados o disfrutar de un momento dulce en casa. Desde su delicada presentación en capas hasta su sabor inconfundible, el tiramisú es siempre una apuesta segura.

En primer lugar, la combinación de ingredientes es clave para lograr un resultado auténtico. La suavidad del queso mascarpone, junto con la intensidad del café recién hecho y la textura esponjosa de los bizcochos de soletilla, forman una mezcla equilibrada y deliciosa.

Gracias a esta armonía, cada cucharada se convierte en una experiencia única.

Por otro lado, esta receta está pensada para que cualquier persona, incluso sin mucha experiencia en la cocina, pueda prepararla sin complicaciones.

Siguiendo los pasos adecuados, conseguirás un tiramisú casero cremoso y lleno de sabor, ideal tanto para celebraciones especiales como para disfrutarlo en la tranquilidad del hogar.

Además, el tiramisú casero admite pequeñas variaciones que lo hacen aún más personal y especial. Puedes añadir un chorrito de licor Amaretto para intensificar el aroma, o espolvorear chocolate rallado o cacao puro sobre la capa final para darle un toque más sofisticado y visualmente atractivo.

En definitiva, esta receta no solo te permitirá saborear un auténtico postre italiano, sino también disfrutar del proceso de prepararlo.

Así que ponte el delantal, reúne los ingredientes y déjate llevar por el placer de crear uno de los dulces más icónicos y apreciados de la repostería mundial.

INGREDIENTES DE LA RECETA

  • 500 g de queso mascarpone
  • 5 huevos (separar claras y yemas)
  • 150 g de azúcar
  • 1 taza de café fuerte (enfriado)
  • 200 g de bizcochos de soletilla (o savoiardi)
  • 2 cucharadas de licor Amaretto (opcional)
  • Cacao en polvo (para espolvorear)
  • Chocolate rallado (opcional)

PREPARACIÓN DE LA RECETA DE TIRAMISÚ CASERO

En un bol, bate las yemas con el azúcar hasta que la mezcla esté cremosa y de color claro.

Añade el mascarpone poco a poco y mezcla suavemente hasta que quede homogéneo.

En otro bol, bate las claras a punto de nieve hasta que estén firmes.

A continuación incorpora las claras montadas a la mezcla de mascarpone, con movimientos envolventes para no perder el aire de las claras.

Después mezcla el café enfriado con el licor Amaretto (si lo usas).Rápidamente, pasa los bizcochos por esta mezcla, asegurándote de no empaparlos demasiado para que no se deshagan.

En una fuente o molde, coloca una capa de bizcochos en la base.

A continuación cubre los bizcochos con una capa de la crema de mascarpone.

Repite el proceso alternando capas de bizcochos y crema, terminando con una capa de crema.

Deja enfriar en la nevera al menos 4 horas, o mejor aún, toda la noche. Antes de servir, espolvorea cacao en polvo por encima y, si te apetece, un poco de chocolate rallado e incluso crema chantilly casera.


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