Alitas a la barbacoa al horno o fritas una receta fácil de hacer

Ay, hijo mío, qué alegría me da contarte mi manera de preparar unas alitas a la barbacoa que quitan el sentido.

Mira, estas alitas son de esas recetas que se disfrutan con las manos, sin prisas y con ganas de chuparse los dedos. Nada de platos complicados, solo el sabor auténtico de la buena cocina casera.

Lo mejor de esta receta es que sirve tanto para una comida en familia como para una reunión con amigos. Siempre me dicen que cuando las pongo en la mesa, no sobra ni una, porque la salsa barbacoa se queda bien pegadita a la piel crujiente y jugosa. Y ya sabes que cuando algo se hace con paciencia y cariño, se nota en cada bocado.

Otra cosa que me encanta de estas alitas es que puedes elegir si hacerlas al horno o fritas. Si quieres algo más ligero y con menos aceite, el horno es tu aliado. Pero si lo que buscas es ese saborcito más intenso y rápido, entonces la sartén es tu mejor amiga. De cualquier forma, quedan estupendas y muy sabrosas.

Estas alitas a la barbacoa tienen esa mezcla de dulce, salado y un puntito ahumado que tanto gusta. No hay edad para disfrutarlas: a los niños les encantan y los mayores siempre repiten. Además, el aroma que dejan mientras se cocinan llena la casa de un ambiente festivo que invita a sentarse a la mesa.

Por último, quiero decirte que no necesitas excusas para prepararlas. Son perfectas para un domingo relajado, para una cena informal o incluso para sorprender en una celebración. Lo importante es que las disfrutes y recuerdes que cada plato sabe mejor cuando se comparte con los tuyos.

Receta casera de alitas a la barbacoa al horno o fritas, jugosas, crujientes y fáciles de preparar con el toque de la abuela María.

Ingredientes de la receta

1 kg de alitas de pollo limpias
200 ml de salsa barbacoa de buena calidad
2 cucharadas de miel
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1 cucharadita de pimentón dulce
1 pizca de ajo en polvo
Sal y pimienta al gusto

Tiempo de preparación

Preparación: 15 minutos
Cocinado: 35-40 minutos (al horno) o 20 minutos (fritas)
Total: 50-55 minutos aprox.

Preparación de las alitas a la barbacoa paso a paso

Primero, limpia bien las alitas y sécalas con papel de cocina, porque así la salsa se adherirá mejor.

Después, en un bol grande, mezcla la salsa barbacoa con la miel, el pimentón, el ajo en polvo, el aceite, la sal y la pimienta. Remueve con calma hasta obtener una mezcla homogénea.

A continuación, coloca las alitas en el bol y remuévelas bien para que queden impregnadas por todas partes. Déjalas reposar al menos 30 minutos en la nevera, aunque si puedes dejarlas más tiempo, mejor, porque así absorberán mejor los sabores.

Si decides hacerlas al horno, precaliéntalo a 200 °C. Coloca las alitas en una bandeja con papel vegetal y hornéalas durante 35-40 minutos, dándoles la vuelta a mitad del tiempo para que se doren por ambos lados.

Si prefieres hacerlas fritas, calienta abundante aceite en una sartén profunda y fríe las alitas a fuego medio-alto hasta que queden bien doradas y crujientes, unos 8-10 minutos por tanda. Luego, pásalas a un plato con papel absorbente.

Finalmente, pincela con un poco más de salsa barbacoa caliente antes de servirlas y verás qué delicia.

Consejos para que las alitas a la barbacoa queden perfectas

Mejor utiliza salsa barbacoa casera, en este enlace te dejo la receta.

Deja marinar las alitas al menos 2 horas si tienes tiempo, el sabor será mucho más intenso.

No te pases con el fuego al freírlas, porque se quemarían por fuera y quedarían crudas por dentro.

En el horno, colócalas sobre una rejilla para que la grasa caiga y queden más crujientes.

Con qué acompañar las alitas a la barbacoa

Estas alitas a la barbacoa van de maravilla con unas patatas fritas caseras, o si prefieres hacerlas en el horno, patatas asadas caseras.

Mazorcas de maíz asadas o una buena ensalada fresca. Si lo que quieres es un menú completo, acompáñalas con arroz blanco o pan recién hecho para mojar en la salsa.

También puedes acompañar de otras salsas caseras de tu elección, para darles un toque especial. Son también muy buna opción como segundo plato de un guiso tradicional.